¿Cómo logro que mi seguro pague por la terapia?

En primer lugar, es importante distinguir entre terapia y asesoramiento. Si tienes un diagnóstico psicológico o te lo doy yo (según la CIE-10), es claramente una terapia. Si no padeces un trastorno psicológico, se trata de asesoramiento. El asesoramiento no es un servicio médico y, por tanto, no está cubierto por el seguro de enfermedad. Lo mismo se aplica a la terapia de pareja (incluso si uno de los miembros sufre un trastorno).

Actualmente, mi terapia sólo la paga un seguro privado o un seguro complementario. Para iniciar el proceso de reembolso, por favor, consulta con tu compañía de seguros acerca de sus condiciones (a menudo vinculadas a la forma de facturación) antes de comenzar la terapia conmigo. Una vez que hayas recibido la información necesaria, no dudes en ponerte en contacto conmigo para que pueda adaptarme a los requisitos de tu compañía de seguros.